jueves, 19 de julio de 2007

Dogs. (o como silbidos condicionan la mente)

"And after a while, you can work on points for style
Like the club tie, and the firm handshake
A certain look in the eye, and an easy smile
You have to be trusted by the people that you lie to
So that when they turn their backs on you
You'll get the chance to put the knife in."

Ah, libertad: añoradísima libertad. Una pequeña y dormida Pepé sobre mis piernas, y un poco del buen floide rosado de fondo. Una Patricia que me regaña, critica mi tan bien ordenado desorden y se lleva ropa sucia "que hay que lavar". Me quiere, lo sé. La adoro y la odio un poco (creo que es como todo, a pique tengo y no tengo razón).

A estas alturas no sé si es justificado un mínimo rencor a la vida que muy buenamente Isis me permitió, no entiendo como las cosas pueden darse de forma tan arbitraria, de que mis deseos por hacer que tres horas de sueño sean como ocho se cumplan, y que lo ÚNICO que quiero en esta vida desde que vi blanca nieves y/o la cenicienta NO SE CONCRETE. Nada pues. No diré qué es porque muero, y aparte no te incumbe "querido lector".
Bah, demonios. Tengo sueño e iré a dormir.

No hay comentarios.: