“There is no pain, you are receding
a distant ships smoke on the horizon
you are only coming through in waves
your lips move but I cant hear what youre sayin
when I was a child I had a fever
my hands felt just like two balloons
now I got that feeling once again
i cant explain, you would not understand
this is not how I am
i've become comfortably numb”.
Y ahora, la breve crónica de mi resfrío.
Viernes
11 am:
Creo que estoy algo enferma, la verdad no sé. Quizás sólo sea un poco de alergia, o algo así. Sería imposible, y de muy mala suerte, enfermarme a vísperas de finales. Qué importa, debo ir a la casa de Fiorella a estudiar para el maldito final de constitucional.
4 pm:
Tomé prestado el rollo de papel higiénico de Fiorella que parece sí estar toda enferma, ojalá no me contagie y se me quite esta porfiada constipadez (sí, inventé una palabra para mi estado crítico de mocos en la nariz e imposibilidad de leer). Ah, más terrible no me puedo ver, creo que si no conociera bien lo que tengo diría que me voy a enfermar.
11 pm:
A decir verdad, la “alergia” de la mañana parece no irse, creo que mejor esta noche dormiré con medias para evitar cualquier “posible resfrío”, aunque tengo calor y no sé por qué estoy sudando tanto si afuera hace un frío terrible. Qué asco me dan estos cambios de clima.
Sábado
6 am:
Maldición, no puedo hablar, y la garganta me duele terriblemente. La susodicha constipadez no se me quitó durante la noche (malditas sean, medias inservibles). Me duele todo, todo. Tengo frío, y calor, y sudo como la csm. Creo que estoy resfriada, demonios. No importa, debo ir a la universidad…¿qué tan difícil puede ser estar en mi clase de penal y luego dar un final de constitucional así?
8 am:
Llevo una hora en clase de Penal, dividida en cuartos dada mi lamentable situación de salir a sonarme los mocos en intervalos de cinco minutos. No entiendo un carajo y quiero que todo termine rápido. Sí, rá-pi-do.
9 am:
La fiebre regresó, o al menos eso creo. Sí, dos personas confirman mi calentura, mi maldita calentura. ¿Por qué enfermarme justo hoy? No entiendo a mi cuerpo, realmente NO lo entiendo.
10 am:
Por fin, el final de Constitucional. Al menos al terminar esto podré ser libre un par de días antes de seguir con la masacre de exámenes. Achú –salud– Eh, gracias.
11 am:
Ha sido uno de los mejores exámenes de mi vida, pese a mi estado deplorable de salud. Debo agradecerle infinitamente a la picardía del buen amigo del no tan buen enamorado de mi no tan cercana amiga, sí. Un poco difícil de explicar, pero sólo diré eso.
12 pm:
He recibido por fin la nota de tarea académica del curso de la anterior hora, y me han propuesto ir por un helado. Helado. Sonará estúpido, pero cuando escuché esa palabra se me fue todo lo malo y acepté ir gustosamente.
12:30 pm:
Acabo de comer el McFlurry de Oreo más rico de la vida, pero empiezo a sentirme un poco constipada. Demonios, demonios, demonios. ¿POR QUÉ CARAJOS COMÍ HELADO? Siento una fría gota de sudor corriendo por mi espalda: me he cagado.
4 pm:
Me siento cagada, soy una imbécil
11 pm:
Nunca debí haber comido ese helado, por más rico que estuviera. Me muero por ir a Sargento, y por la puta madre que no puedo ir. Al menos no soy la única enferma por aquí.
Domingo
7 am:
Los mocos no me han dejado dormir, y creo que tuve fiebre toda la noche. Esperen. Mi madre lo corrobora: tengo treinta y ocho grados, igual que todo el fin de semana. Creo que me voy acostumbrando a esto del calor incesante y el frío de a pocos.
11 am:
Un poco de té con limón, y una que otra tostadita.
1 pm:
Algo de caldo de pollo y, CON DOS DÍAS DE RETRASO, un par de panadoles antigripales. Me dicen que Sargento no estuvo tan bueno, al menos eso me tranquiliza un poco y calma mis ansias de salir.
3 pm:
Creo que las pastillas me han dado sueño, no pienso leer un carajo. Regresó el sudor frío, y sigo muriendo de sed.
9 pm:
Maldito resfrío, te odio. Te odio. TE ODIO. Empiezo a creer que soy inmune a los panadoles antigripales, dado que no me han hecho UN carajito. Al demonio con todo.